En la reunión de Córdoba -días atrás- estos convocantes empezaron mal. De entrada la coalición demostró sus limitaciones al no estar presente ni el legislador Pedro Ochoa (P.de la V. ), ni Marcelo Pascual, ni otros referentes mediáticamente anunciados. En realidad, como nadie es tonto en política, habían trascendido las habituales reuniones que Moreno y Gutiérrez mantienen con el Ministro Carlos Caserio verdadero artífice de la estrategia de la reunión que tenía un solo objetivo: desprestigiar y debilitar a Eduardo Accastello.
Por lo general la ceguera en política hace perder los altos objetivos cuales son la incorporación de Córdoba en el Proyecto Nacional y Popular que da sentido a nuestras luchas, no en desprestigiar a compañeros. El recurso de la política debe implementarse para reparar los errores del gobierno provincial al haber colocado a Córdoba en oposición a las medidas del gobierno nacional de Néstor y Cristina inspiradas en los históricos lineamientos de Perón y Evita.
De Ricardo Moreno los afiliados saben que su limitada convocatoria se relaciona con que solo está empeñado en dirimir viejos temas con Olga Riutort que poco tienen que ver con el Justicialismo que se dice representar. A Mónica Gutiérrez no se le conoce ningún antecedente peronista, solamente juecista ocupando una banda legislativa a la que no renunció cuando el titular del Partido Nuevo le exigió rechazar el aumento de las dietas legislativas. El resto de la mesa de la reunión tiene escasa incidencia política.
¡Empezaron mal! no les dio resultado la maniobra. Poco favor hacen a nuestro Gobierno de la Presidenta Cristina Kirchner con estas actitudes. Es evidente la adhesión popular que respalda a la cra. Presidenta, se percibe en los barrios y localidades, gozan de amplia aprobación las mas trascendentes medidas de su gobierno: recuperación del empleo, transferencia de recursos a los sectores mas necesitados; reactivación de la actividad económica; apoyo a la producción nacional; plan de obras públicas sin antecedentes en toda la geografía nacional; apertura de relaciones con América Latina; reconocimiento internacional que desde hace muchos años nuestro país no disponía.
La posición política de Eduardo Accastello no deja lugar a dudas: el Partido Justicialista y el gobierno provincial deben:
a) definir públicamente el apoyo al gobierno de la Presidenta Cristina ;
b) formular una amplia convocatoria a constituir un frente político-electoral con los numerosos sectores políticos y sociales interesados en conformar en Córdoba una fuerza insertada en el Proyecto Nacional y Popular.
Partido Justicialista Villa María
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